El líquido pericárdico es un fluido que actúa como lubricante del movimiento del corazón reduciendo la fricción asociada al bombeo de la sangre. Se encuentra en pequeñas cantidades entre las dos capas (membranas) del pericardio. Hay dos razones principales para la acumulación de líquido, que son un desequilibrio de la presión dentro de los vasos sanguíneos o la inflamación del pericardio. La etiología más frecuente del Derrame Pericárdico es maligna, dentro de la cual el cáncer de pulmón y el de mama son los más frecuentes; luego siguen otras causas como el linfoma, enfermedades infecciosas, metabólicas, postoperatorio de cirugía del tórax, traumas, mesenquimopatías y hasta idiopáticas.